La cromoterapia es una técnica enmarcada dentro de las terapias alternativas, utilizada para ayudar a tratar enfermedades, dolencias y desequilibrios energéticos a través de la utilización de los colores.

El mundo está lleno de color, siendo estos  vibraciones de ondas electromagnéticas, es decir, energía. Así, pues, los colores no son una propiedad inherente a los objetos, sino que emergen de la interacción de estos con la luz.

La cromoterapia es una forma de terapia alternativa vibracional. Las tonalidades son determinadas por frecuencias de vibraciones de ondas, cuyos ritmos, velocidades y amplitudes difieren entre sí, dando lugar a los colores. Estos colores, por su parte, ejercen distintos efectos sobre nosotros en los planos físico, emocional, mental y espiritual.

¿A través de qué mecanismos los colores influyen en nosotros?

La percepción del color -misma que llega a nosotros a través de la vista-, se genera cuando algunas  ondas electromagnéticas rebotan en los objetos en tanto que otras son absorbidas. Las que rebotan son, de hecho, los colores que percibimos en los objetos en tanto que los colores que no vemos -con una longitud de onda electromagnética distinta-, son absorbidos por los objetos. Así, pues, en nuestro espectro de visión lo que realmente vemos son rebotes de ondas electromagnéticas que afectan a nuestro sistema visual y, por consiguiente, a nuestro cerebro.

La percepción de los colores es una experiencia tan subjetiva, que incluso se discute sobre la forma en la que nuestro cerebro, según la cultura a la que pertenecemos, se entrena para captarlos y codificarlos.

Aunque la connotación que se le da a los colores puede variar de una cultura a otra (pudiendo existir lugares comunes) lo que si es cierto es que vivimos en un mundo lleno de colores, y que los colores desempeñan un lugar muy importante en la vida humana.  La publicidad, por ejemplo, utiliza los colores para tratar de influir sobre las decisiones de los consumidores al momento de la compra, en tanto que muchos colores se encuentran asociados indefectiblemente a ideologías que identificamos de forma consciente e inconsciente, y que nos afectan de un modo que no siempre logramos advertir.

Así, pues, psicólogos, sociólogos, antropólogos, especialistas en marketing y físicos coinciden en el inexorable impacto que tienen los colores en nuestras vidas.

Pero ¿qué dice la historia de los colores?

Los antiguos egipcios utilizaban gemas que al dejar pasar la luz, proyectaban distintos tonos que eran utilizados para sanar distintas dolencias en distintas partes del cuerpo. Si bien hoy no ha sobrevivido casi nada de aquellos saberes, se sabe que los colores formaban parte de la medicina egipcia.

¿De qué forma nos afectan los colores?

-Los colores pueden afectar nuestro estado de ánimo, con lo cual, también inciden en nuestro bienestar.

– La selección de determinados colores -especialmente en nuestro atuendo- forma parte de la expresión de nuestra identidad personal. Esto se asocia a su vez a la forma en como los demás nos perciben, es decir, a la imagen que proyectamos, la cual, puesto que somos seres sociales, siempre estará vinculada a nuestro bienestar.

– Los colores afectan la forma la que percibimos los espacios. Por ejemplo, los tonos oscuros hacen que los espacios cerrados se vean más pequeños, en tanto que los colores claros amplían dichos espacios. Asimismo, algunos colores son más adecuados para algunos espacios que otros, haciéndonos sentir más confortables en ellos.

– Los colores están asociados a símbolos e ideologías fácilmente reconocibles. Dichas ideologías, según la sociedad a la que pertenezcamos, pueden impactar a nuestra psique, siendo este un factor culturalmente determinado.

– Los colores pueden tener un efecto sobre nuestros chakras, los cuales, vibran a frecuencias análogas a los distintos colores. Por consiguiente, los colores pueden ser utilizados para equilibrar la energía de los chakras.

– Hay colores invisibles para nosotros que pueden ser perjudiciales. En efecto, el espectro electromagnético humano es limitado. Así, por ejemplo, no percibimos la radiación ultravioleta, la cual,  puede ser nociva para el organismo. La luz ultravioleta forma parte de las ondas electromagnéticas que emite la luz solar y es la razón por la cual usamos bloqueador solar. No obstante, también es emitida por equipos electrónicos como nuestros ordenadores.

¿Cómo funciona la cromoterapia?

Habida cuenta de que los colores nos afectan de manera directa, el uso de los colores -combinado con otras terapias alternativas-, busca restablecer el equilibrio holístico de nuestro ser. De este modo la cromoterapia puede utilizarse para producir un efecto favorable sobre los chakras, o bien ser utilizada sobre la parte del cuerpo afectada, en aras de ayudar al organismo a restablecer el equilibrio energético necesario para el proceso de autosanación. Si quieres saber más sobre el poder de los colores te espero en el Barrio de Salamanca en Madrid para una terapia holística, donde trabajaremos entendiéndonos como seres integrales, cuerpo, mente y alma.

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