¿Qué son los registros akáshicos?
¿Existe algún registro que albergue toda la información energética de nuestra existencia? ¿Queda grabado de algún modo nuestra manifestación como seres energéticos en este plano?
Nuestras palabras, pensamientos, emociones y acciones acompañan nuestra experiencia de vida, dejando una huella en un campo de energía muy particular llamado registro akáshico. La palabra akáshico, viene del sánscrito akasha, que significa sustancia energética de la que emana todo lo que existe; la sustancia primaria de todas las cosas que han sido formadas. Por otro lado, al hablar de registros, se busca significar que es el archivo o repositorio de las experiencias del alma en su recorrido hacia el desarrollo de niveles superiores de conciencia.
El registro akáshico es, pues, el lugar cuya existencia se ubica en un plano distinto, que vibra a una determinada frecuencia y que alberga el archivo de información energética de cada ser.
¿Podemos acceder al registro akáshico?
Es posible acceder a los registros akáshicos, o, dicho de otro modo, sintonizar con su frecuencia vibratoria para captarlos e interpretarlos. El registro akáshico, como primera cristalización del espíritu, es muy sensible a cualquier vibración energética. Por consiguiente, toda la actividad del ser, queda impresa en el registro -o archivo-, por más sutil que sea su frecuencia vibratoria. A este respecto, quién hace la lectura del registro akáshico es el canal de acceso a este archivo de registros existenciales.
Resulta necesario aclarar que los registros akáshicos no son regresiones a vidas pasadas, ni involucran algún método de hipnósis. No obstante, si permiten leer información sobre vidas pasadas. Por otro lado, es importante tener en cuenta que la información de los registros se presentará en la medida en que estemos preparados para recibirla y, además, desde un estado puro del corazón y con las mejores intenciones. Un especialista en lectura de registros akáshicos podrá orientarte con mayores detalles sobre esta terapia, o si, por el contrario, existe alguna otra terapia holísticas de la que pudieras beneficiarte en mayor grado en este momento de tu vida.
Asimismo, es recomendable dejar pasar cierto tiempo entre una lectura y otra para asimilar la información recibida, y para aprovechar al máximo la siguiente sesión -habida cuenta de que los registros akáshicos se actualizan en todo momento, y que haber trabajado con los registros akáshicos al menos una vez, ya supone efectos benéficos sobre nuestro ser y nuestro estado de bienestar.
¿Por qué solicitar una lectura de registros akáshicos?
Las lecturas de registros akáshicos son terapias orientadas a descubrirnos y aceptarnos a nosotros mismos. Nos ayudará a entender patrones repetitivos en nuestras vidas -cuyo origen parece no encontrar una causa muy clara-, conflictos emocionales, situaciones kármicas, y, en resumen, nos hará desarrollar un nivel más profundo de autoconocimiento, un mayor grado de conciencia sobre nuestras acciones y su articulación bajo el marco más amplio de la unidad con el todo. Entender nuestra situación actual, nuestra misión de vida y el sentido de nuestra existencia, son todos aspectos que acompañan el desarrollo de la conciencia a través de esta técnica.
¿Qué se puede consultar?
En las sesiones de lectura de registros akáshicos, en general, cualquier cosa es susceptible de ser tratada. No solo aquellos problemas más explícitos y acusiantes son propicios para la consulta, todo aquello que nos inquieta o nos causa preocupación, por más extraño o nimio que pueda parecer a otros (tal vez alguna fobia sin mucho asidero, o un sentimiento particular hacia algo), tiene significado y relevancia para nuestro desarrollo personal, y, por consiguiente, constituyen interrogantes adecuadas para tratar en las sesiones.
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