La andropausia no es más que el nombre que se le da a los cambios hormonales que viven los hombres al llegar a la tercera edad. Es, pues, un proceso concomitante a la vejez, siendo conocida también como el climaterio masculino.
Estos cambios hormonales atañen principalmente a una disminución en los niveles de testosterona, y comportan efectos psicológicos, sociales, fisiológicos y espirituales, siendo que un gran porcentaje de personas ven afectada su calidad de vida a raíz de este proceso orgánico. Junto a la disminución de la testosterona, la andropausia disminuye las células Leydig, las cuales, desempeñan un papel importante en la producción de testosterona a nivel testicular.
Según la Organización Mundial de la Salud OMS, se estima que alrededor del 25% de la población mundial presenta algún tipo de trastorno asociado a la andropausia. Cabe, pues, preguntarse ¿Qué determina que algunas personas se vean más afectadas por la andropausia? Existen diversos factores dentro de los que se encuentran los factores emocionales, psicológicos y energéticos y, por supuesto, los pensamientos y creencias asociados a estas dimensiones humanas.
No siempre es la vejez
Cabe resaltar que existen casos -aunque en una proporción mucho menor en términos relativos-, en que la andropausia es originada por la falta de un testículo, siendo que, como se ha mencionado de manera sucinta, los testículos tienen como una de sus funciones principales la producción de testosterona. Así, pues, alrededor del 10% de las personas que se les ha extirpado un testículo a causa de, por ejemplo, un tumor, pueden presentar algunos síntomas normalmente asociados a la andropausia tempranamente en la vida.
La andropausia no es una enfermedad
Pese a la percepción subjetiva de quienes presentan síntomas de andropausia -y habida cuenta de que dicha percepción esta culturalmente matizada-, la andropausia no es en modo alguno una enfermedad. Antes bien, es un proceso vinculado al envejecimiento y a los cambios vitales. Entender esto, es fundamental para nuestro bienestar psicológico y emocional si estamos presentando síntomas de andropausia.
No obstante, hay diferencias importantes entre quienes ya están en la fase de la andropausia, tal como las hay en la vejez. Algunas personas se sienten mejor y están más sanas al envejecer y al entrar en una fase de andropausia. Esto depende de muchos factores asociados a los hábitos que se han llevado en la vida, a factores genéticos e incluso a factores sociales.
Sin embargo, y a pesar de todo lo expuesto anteriormente, quienes han incorporado prácticas como la meditación o el yoga, el ejercicio y una alimentación sana, suelen tener una mejor calidad de vida al pasar de los años. Y si además han trabajado en su crecimiento espiritual, autoconocimiento y cambio de nivel de consciencia ya sea de forma individual, grupal o con la ayuda de alguna terapia alternativa, percibirán la llegada de la andropausia de una forma más leve, y sin ver afectada considerablemente su calidad de vida.
¿Cómo aborda la andropausia la medicina occidental?
La andropausia genera algunos cambios metabólicos. Se puede engordar y perder masa muscular de una manera más acelerada. Asimismo, se puede perder elasticidad en las articulaciones, y puede haber una reducción en la masa ósea según afirma la Asociación Española de Andrología. Dentro de la esfera emocional, la depresión puede acompañar a estos efectos.
La medicina occidental, aborda la andropausia a través de terapias hormonales, buscando incrementar tanto los niveles de testosterona como los de estrógeno, cuya relación con los niveles de testosterona ha sido demostrada por varios estudios. No obstante, el aspecto emocional y psicológico se suele relegar, como si no formase parte de los desequilibrios que normalmente ocurren tras la andropausia. A este respecto, las terapias holísticas constituyen una alternativa complementaria de invaluable utilidad, toda vez que la depresión puede tornarse en un problema grave. Además, En el plano espiritual, mental, emocional y energético, las terapias alternativas son el principal aliado para el equilibrio y crecimiento humano, en un campo en el que la ciencia occidental moderna apenas empieza a dar sus primeros pasos, tal como lo han demostrado disciplinas como la Neurociencia, al estudiar los efectos benéficos de la meditación, o la epigenética, al demostrar que no somos esclavos de nuestros genes.
Beneficios del reiki para la andropausia
Como se ha explicado en artículos anteriores, el reiki es una terapia holística que utiliza las manos del terapeuta como conductores para hacer que la energía del cuerpo, de los pensamientos y de las emociones puedan fluir de manera coherente en aras de que el organismo restablezca su equilibrio.
Ahora bien, no todos los trastornos asociados a la andropausia pueden ser tratados con las terapias de reiki. Sin embargo, esta terapia energética ha demostrado ser efectiva al tratar algunos síntomas en esta fase de declive hormonal.
Los beneficios del reiki son especialmente notorios en el plano emocional, habiéndose registrado efectos positivos al combatir la depresión, el desgano y la fatiga. También ha demostrado ser útil en la disminución del insomnio y la falta de concentración. Asimismo, muchos pacientes aseveran que han sentido un restablecimiento de las energías y de su equilibrio emocional tras las terapias de reiki.
Por lo tanto, el reiki -o cualquier terapia energética o alternativa-, es muy beneficioso para afrontar los cambios que se producen en la andropausia, ya que además, los pacientes logran cambiar los pensamientos limitantes asociados, transformando así la percepción que tienen sobre este proceso vital, con lo cual, pueden lograr vivir esta etapa de una forma tranquila y natural.
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